domingo, 10 de febrero de 2008

Sueños de aire


Nunca pensé en la cristalización de mis abstractos sueños de aire.

Que ese aire mágico se materializara en ti.

Tú y mis sueños, lo más mío que tengo.

De polvo cósmico pasaste a insensible flecha certera y despiadada

que asedia violenta mis temores de que te quiebres, cristal perfecto, cortándome el cuerpo y los sueños,

los malditos sueños,

reventándome en lágrimas de sangre espesa, entregándome despiadada

a la maldición asumida de solitarios caminos

fríos sin tenerte, sin sentirte, olvidándote con odio

y maldiciendo, una vez más, al mundo miserable y sus estúpidas razones.

Aristo

Desde el mundo de las ideas