sábado, 14 de noviembre de 2009

Ojalá que no seas tú


Te perdí y ruego que no seas el amor de mi vida.


Te perdí y te dejé ir.

Te perdi y cuando te encuentro no estás, porque ya te fuiste.


Te perdí, pero todo me lleva a ti:

las calles, las flores, el viento, la música, las risas, los sueños.


Cómo vivir así, sabiendo que te perdí én un día de locura.

Y ahora, más cuerdo que nunca, me arrepiento de ser lo que fui.


Risato

Desde el mundo de las ideas