lunes, 28 de abril de 2008

escupitajo

¿Los sueños qué? ¡Nada!
¿Las palabras de amor qué? ¡Basura!

A ver si dejas de soñar como un estúpido
A ver si te das cuenta dónde estás pisando
A ver si vienes a la realidad y te quedas en ella

las malditas relaciones desechables
el amor falso y miserable
cobarde y mezquino

¡indigerible! ¡vomitable!

No existen mis sueños, pues sueños son.

No-son.
La negación de la realidad. No existes.

¿Y se podrá hacer de la realidad un sueño?

Las risas de los cobardes. La traición de las ratas.
El odio mío que me corta la garganta y cae en espesa sangre roja a esta negra hoja.

¡No! ¡No es mi realidad!

Vete Aristo. En la ciudad ya no se sueña,
eso aquí se condena

te aísla
te separa
al alma te dispara

Adiós princesa de corona caída


¡Fuera de mis sueños! A la correcta realidad bienvenida.

Sangra, sangra, sangra la herida

se desangra en lágrimas negras antes contenidas

chorrea como vómito la pena maldita






Aristo
sucio rufián lastimado

crucificada la estúpida ilusión

Desde el momento en que acepté lo sabía.
Incluso antes. Desde que me dijiste que serías un precipicio.
Claro que caería. Un precipicio es eso, una caída. Pero claro, es fácil hablar dos años después.
¿Será el eterno retorno de lo idéntico? Quizás.

Estaría mucho mejor de no haberte amado esas dos veces.
Pero me sentiría un cobarde. Más vale un día de león que cien de ovejas. No me arrepiento.

Prometimos no sufrir. Te traicioné.
Pero sabes?
Prefiero des-garrarme y sufrir de nuevo tu partida.
Prefiero sentir de nuevo cómo se des-hace el suelo en mis pasos.
Prefiero sentir el dolor de la piel, la asfixia de la garganta al cortarle tu aroma,
prefiero la náusea, el silencio negro y la mirada ácida

todo lo vale por esos dos momentos
"lo que no me mata me hace más fuerte"

no le tengo miedo a la vida
me arrojo altanero a sus brasos
le digo SÍ al dolor, al celo y a la rabia

me entrego al desquite de los dioses
"No te gustó desafiarnos, pues ahora sufre!"

Humilde lo acepto
y me enclaustro en mi lapidario silencio
para convertir la pena licuosa en duro concreto para el espíritu

a ver si crezco
a ver si se me hace roca fría el corazón
a ver si odio como amo

Droga Maldita No Puedo Vivir Sin Ti

y tampoco quiero re-habilitarme,
pero morir de angustia por no-tenerte, ¡Nunca! ¡Jamás!

me entrego a la vida y me entrego a sus futuros presentes
con una forzada sonrisa les digo SÍ, aquí estoy una vez más, de pie.
Desafiante encarándole, "bueno y eso era la vida, ¡pues que vuelva a comenzar! "

no le temo a los sufrimientos
crecí con y en ellos
también con hermosos momentos

pero los golpes me han tocado fuerte
me han hecho sangrar por los ojos
y asesinar al escribir

víctima y victimario soy de mi sentir
loco osado aplasto las penas con detalles
y sigo mi camino hacia la búsqueda de ser feliz

amores he tenido muchos y a cada uno lo he amado como el único
penas y amarguras han decorado cada una de mis palabras escritas
y es que en cada partida algo de uno se va

en la otra persona
en tu persona
se van mis presentes ilusiones vagas

el amor es una maldición
un veneno que se toma a través del cuerpo
la esclavitud del alma que reclama

el amor es el sentido de vivir cuando se lo vive
ahora vete
para siempre

Siem-pre fue una mentira
que creí infantilmente
siem-pre no existe
siempre es siempre
es el sí a cada presente

contra todo
contra todos
contra uno mismo

lo seguiré buscando
en el beso despechado de la noche
en la mirada desnudadora, filosa intimidadora

el santo veneno
que me saque éste el cual padezco

el amor sí (em-pre?) muere




Aristo
acuchillado

Desde el mundo de las ideas