divagaciones suicidas

solos se me cierran los pesados ojos
los abro lento
me cuesta hacerlo

mientras me taladran la mente siniestros pensamientos

en roja escritura sangrienta los libero

con la mano temblorosa y el pulso caliente

de la prisión de mi cuerpo los desencadeno

uno a uno pasarlos por el cuchillo a todos ellos

cortarlos para que detengan su maldito juego

y tú, que sólo ríes al verme agónico
me pisoteas mientras caigo solo

la sicopatía y las ideas enfermas me asedian

me consume el alma

la sed de un amor violento y de sangrienta poesía

Aristo

¡maldito!

disfrutas reirte de mis miedos
te alimentas de ellos

pero la moneda al aire de la suerte puede cambiar

y puede que te aplaste

quieres ser Dios y terminarás crucificándote

a
r
i
s
t
o

sucio rufián desconfiado

re-conocimiento a un alma sublime

por qué vienes a mí ahora
qué buscas metiéndote entre mis sábanas y en mi mente

sabes que soy débil a ti
sabes que siempre tendrás todo de mí
sabes que mi cuerpo y mi alma te pertenecen

pero por qué
por qué vienes a azotarme
con esos tibios recuerdos de tus rojos besos

o seré yo el que te llama?
que inconsciente te llamo porque me haces falta?

da igual el motivo
estás
al lado mío mientras escribo
besando mi sombra te veo al cerrar mis ojos

quiero una noche contigo
animalmente deseo otra noche contigo
mujer-niña eres hermosa poesía
tus ojos espejo cristalino de mis deseos

tienes la llave del volcán de mi descontrol
sabes hacerme florecer en llamas y sólo tú sabes apagarlas

eres el diálogo único con mi alma solitaria
decifraste su código
encontraste su tímida música en el latido de mi corazón parchado
siempre que quieras podrás encontrarlo
siempre que quieras podrás aplastarlo

Aristo

siem-pre tú-yo