no entiendo
la maldad, la mentira, el veneno en las palabras
el capricho egoísta de quien de lejos mira
el mundo es malo
la gente es mala
vete rápido y entierra lo que te di
poco vale
poco importa
desechable, intrascendente, miserable
entrégate cobardemente a tus proyectos
arranca de los momentos y húndete lento
Aristo
y el pensamiento siniestro
Es él, ser de voz y viento que habita dentro de mi piel. Es Aristo Risato, el de las ideas malditas, el de las letras de sangre.
lunes, 25 de agosto de 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Escribe y muere