lo hago ritmo en mi manos
mis pensamientos ya no están abrumados
liviana la mirada recorre el recuerdo
el de ella
y otros más
los deseos despiertan lento de mi ya no cansado cuerpo
es la hermosa vida
y la sed de vivirla
sediento de estímulos
hambriento de alegrías la recorro felino
pasando rasante y sigiloso asecho a mi felicidad
mi sentido de vida: conquistarla
a ella y a esa mujer que me roba el alma con sus ojos
esa mujer que me transforma el tiempo al tocar accidentalmente mi mano
ella todo lo transforma
todo lo altera
todo lo cambia
otra atmósfera
otro aire
otros sonidos
escondidos para no ser encontrados
como mis arrebatos exaltados
y jugamos a mirarnos
aún sin el coraje suficiente para encontrarnos
pero te imagino y en mi soledad sonrío
eres el recuerdo y en el presente que te recuerdo
eres mi carcajada silenciosa al mundo
eres en la música que te trae a mí
donde sea que estés
estás aquí
conmigo
Aristo
Qué extraño es para mí, mujer leer la pasión que un hombre puede sentir por una de mi género, si fuese así la realidad.
ResponderBorrarSiempre me impresiona cómo puede ser así, provoca mi curiosidad saber si de verdad es así, y ojalálo fuera, mis experiencias vastas no son como para opinar de estos temas... pero los sonidos, nos rodean, murmullos de la vida, simplemente sonidos, amorfos sin definicion que nos manejan a su antojo, melancólicos y joviales...
Siempre es grato comentar en virtual cuando no se puede comentar en realidad.
Saludos!
Como el encaezado lo indica, escribo y muero.