el consumo desenfrenado y la valentía estúpida a causa de éste
me gusta la noche
no puedo evitarlo
como gato nocturno me la paso husmeando
con la mente infectada
ansioso de sexo
ansioso de drogarme duro y recorrer las calles
libre soy en mis noches bizarras
libre me desencadeno de las leyes y sus estúpidos policías
no les temo
a mil por hora paso por su lado desafiándolos a seguirme
¡cerdos! ¡gusanos!
en la noche me pierdo y me entrego a mi libertad
a la lujuria exquisita y a las miradas libidinosas
húmedas sólo quieren chuparme y que les amase el redondo trasero
la noche
la exquisita noche
en la exquisita noche busco la sobredosis
el mareo antes de dormirme
cuando hay que enfrentarse a la solitaria realidad
y golpea el malestar físico en el estómago
el hígado quema
y el aire se hace asqueroso a la altura de mi nariz y boca
un cenicero siento pegado a mi cara
viene la náusea y a ratos el arrepentimiento
la noche
la noche se está llendo y viene el día
con todo su mundo de lucidez y responsabilidades que no quiero
mejor cierro los ojos y me duermo para despertar en la próxima noche luego
Risato
gato-nocturno
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Escribe y muere